Privado, público
o concertado, bilingüe o no, laico o religioso, cerca o
lejos de casa. Estas son algunas de las dudas que asaltan a los padres cuando
nos planteamos en qué colegio matricular a nuestros hijos. Las claves para
elegir el colegio de los niños, por experiencia propia, residen no en buscar el
mejor colegio, porque colegios buenos hay muchos, sino en elegir un colegio mejor para nuestros hijos, que
esté adaptado a las necesidades del niño primero y a las familiares después.
Puntos fuertes en la elección del colegio de los niños
Teniendo en
cuenta que los niños pasarán unos 14 años en el centro educativo que elijamos
para ellos, desde los 3 hasta los 17 años, es importante afinar criterios y
establecer un régimen de prioridades para acerta con la elección más adecuada.
-
Distancia.
La cercanía a casa del colegio es un factor positivo,
pero no determinante para elegir colegio. La cercanía facilita los
desplazamientos de los niños y facilita que les pueda recoger otra persona, y
la lejanía implica revisar el servicio de rutas del colegio y el servicio de comedor. Los padres deben plantearse si
pueden conciliar esa distancia con su itinerario de trabajo o ritmo de vida sin
que genere problemas familiares. No obstante, la libertad de elegir
colegio para los niños sin estar condicionados por el barrio donde vivimos o el
municipio abre un amplio abanico de posibilidades a los padres para la elección
de centro educativo.
- Idiomas. Antes, sólo los colegios exclusivos disfrutaban de una educación bilingüe. Ahora, numerosos centros
públicos y concertados ofrecen esta ventaja para los niños, ya que está
comprobado que cuanto antes empiecen los niños a aprender un segundo idioma más fácil les resultará ser
bilingües.
-Nivel
académico del centro. Es importante conocer si el centro cuenta con algún certificado de calidad. Además, el colegio debe poner
a disposición de los padres los resultados de los alumnos en las pruebas de
Selectividad o en las pruebas de conocimientos que realiza cada Comunidad en 6º
de Primaria.
- Ideario del centro. ¿Religioso o laico? Las variables ideológicas,
morales y religiosas del colegio deben tenerse en cuenta.
- Proyecto educativo. Estudiar el modelo de aprendizaje que utiliza el colegio, si tienen
orientación psicopedagógica (a través de este departamento, se ofrece
orientación al niño, y se detectan problemas de aprendizaje o conducta), clases de
refuerzo... y si posee otros puntos fuertes como formación musical, nuevas tecnologías, deportes, oratoria... son
aspectos que los padres también debemos valorar.
En este punto hay que
distinguir dos aspectos:
1. Si el
colegio cuenta con un método pedagógico
alternativo,
es fundamental corroborar que está certificado por el Ministerio
de Educación, y que se cumplen los objetivos que marca
el ministerio en cada etapa.
2. Si el
colegio es extranjero (Liceo francés, Colegio Alemán o
Instituto Británico) los padres debemos ser conscientes de que además de la
lengua, estamos vinculando a los niños con una cultura y un sistema educativo
distinto, algo dificil de seguir en casa si no tenemos vinculación con ese
país.
-
Actividades extraescolares. Permiten al niño desarrollar otras competencias y
habilidades y fijar sus gustos en el apartado de ocio y deporte. Debemos
utilizar las actividades extraescolares en favor del niño y no para
ampliar el horario escolar.
- Niños por clase. El número de niños por clase empieza a aumentar ahora otra vez
a consecuencia de la crisis económica para abaratar costes. Los padres somos
concientes de que a mayor número de alumnos, los profesores pueden prestar
menos atención a cada uno. La atención personalizada mejora la calidad de la
enseñanza.
- Visita
al centro educativo. Una entrevista con el director del colegio y una visita a las
instalaciones para comprobar sobre el terreno todo lo que ofrecen es el último
paso para culminar nuestra elección.
Fuente: www.guiainfantil.com