Mi niño no quiere separarse de mí en
ningún momento…si me voy llora desconsoladamente
Para entender este proceso, tengamos
en cuenta que el bebé ha establecido un vínculo afectivo con la madre o persona
que lo cuida; de acuerdo a su edad y nivel cognitivo, él piensa y siente que no
ver a su madre significa que ya no existe, desaparece de su vista y de su
mente. Para comprenderlo mejor, los bebés en los primeros meses, no tienen
claro el concepto de “permanencia de objetos”, esto es, que un objeto existe a
pesar de que no lo ve. Si no ve a mamá, se asusta mucho porque piensa que no va
a volver.

Alrededor de los seis meses usted
puede empezar con el siguiente juego: Tápese con una manta o toalla, como
jugando a las escondidas con su bebé, dígale “¿dónde está mamá? Y luego haga
que la vea y dígale “aquí está mamá” o “ya regresó mamá”, abrácelo y disfrute
de este momento.
En el caso de la relación madre-niño,
esto es más intenso porque se ha establecido con la madre un apego único y
especial, para los bebés las madres son como una prolongación de ellos mismos.
Ya a partir del octavo mes pasará a una nueva etapa, su nivel de desarrollo es
mayor.
Es necesario que los padres brinden
la seguridad y la confianza que el niño necesita para estar con otras personas,
que se sienta seguro y entienda que la madre no lo abandonará, que regresará y
estará con él. Si los padres se angustian por no saber qué hacer ante el llanto
de su hijo las cosas empeorarán porque los niños absorben fácilmente emociones
y sentimientos.
En ocasiones la ansiedad de
separación se presenta en edades mayores, hasta 2 o 3 años, en este caso, es
probable que el niño presente problemas para ingresar al nido, los padres deben
poner en práctica las recomendaciones de un especialista ya que posiblemente
sea necesario reforzar el vínculo con el niño.
Al realizar juegos con su
bebé irá entendiendo que a pesar que él no la ve, usted sigue presente y
regresa con él. La finalidad de estos juegos es que el niño se sienta confiado
a pesar de que no la vea.
Cuando note
algun característica de angustia de separación en el niño, aproveche un
momento en el que se encuentre muy tranquilo y dígale que van a jugar a las
escondidas. Puede hacerlo con un
muñeco a modo de ejemplo, luego diríjase hacia otro
llugar de casa donde su hijo pueda verla y desde allí háblele y
hágalo sentir que usted sigue con él y que regresará. Preste atención a lo
que le responde, o cómo se pone (ansioso,
lloroso), lo ideal es mostrarle que es un juego y que no pasa nada. Cuando haya aprendido
este proceso, intente repetirlo pero esta vez hablándole desde un lugar donde
no pueda verla.
Luego debe aumentar los tiempos, dependiendo de las
necesidades de su niño, lo importante es que se sienta seguro y que empiece a
adaptarse a la separación con usted.
- Bríndele más espacios para compartir con familiares, preséntele nuevas personas, haciéndolo sentir en confianza y que todo estará bien. Llévelo de paseo, la idea es que empiece a socializarse y que conozca nuevas personas, de esta manera no percibirá cambios bruscos en su desarrollo socio-emocional.
Fuente: www.cosasdelainfancia.com